Me encuentro nuevamente en el lugar momento en el momento correcto, por culpa de la casualidad o por motivos reales...
No me asusta la idea de que a veces las cosas ocurran sin intervención mía. Sobre todo, no ahora. Me agrada lo que veo... Sí, claro, el ave maravillosa no puede alzar el vuelo libremente, las alas cortadas por la mal llamada civilización. Pero es deslumbrante de todas maneras. Y me dejo caer en su canto antes de que la realidad se atreva a intervenir.
Sueño con lo imposible, y espero que algo pase.
Finalmente el reloj destruye lo que pienso y me vuelvo a detener, preguntandole a mi subconciente lo que nunca he podido reponder: ¿yo pertenezco aquí?
No hubo euforia, pero al callar el ave, es como si la hubiera habido, y ahora se ha esfumado. Sin embargo, la pregunta clama por su amada y desconocida respuesta.
"Ya te responderé", murmura el subconciente, y una parte de la realidad se paraliza.
martes, 30 de septiembre de 2008
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1 comentario:
Me identifico...
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